La ligadura de trompas es un proceso quirúrgico que sirve de método de anticoncepción permanente para las mujeres que no quieren tener más hijos. No tiene efectos secundarios a largo plazo y, en general, no es reversible.
Supone el corte o bloqueo de las trompas de Falopio, de manera que los óvulos liberados por los ovarios no pueden moverse por las trompas y, por tanto, no entran en contacto con el esperma. Habitualmente se emplea anestesia general y, aunque puede producir alguna molestia, no es un proceso doloroso.
Puede realizarse mediante:
- Minilaparotomía. Se realiza una incisión pequeña en el abdomen y se atraen las trompas de Falopio hasta la incisión para cortarlas o bloquearlas.
- Se inserta en el abdomen un tubo largo y fino con una lente, a través de una incisión pequeña. Este laparoscopio permite a la doctora ver y bloquear o cortar las trompas en el abdomen.
En principio, cualquier mujer puede someterse a una ligadura de trompas, incluidas aquellas que hayan dado a luz en los siete días anteriores, estén amamantando o infectadas con VIH – estén recibiendo o no terapia antirretroviral-.
Asesoramiento
Teniendo en cuenta que se trata de un proceso permanente es importante que reflexiones en profundidad sobre la posibilidad de someterte a esta operación y que transmitas todas tus dudas e inquietudes a tu doctora. Además, debes dar tu consentimiento informado a través de un formulario.
Antes del procedimiento, deberías:
- Usar otro anticonceptivo hasta el procedimiento.
- No comer ni beber nada durante 8 horas antes de la cirugía.
- No tomar medicamentos durante 24 horas antes de la cirugía (a no ser que así se te indique).
- Usar prendas de vestir limpias y flojas al asistir al centro.
- No usar esmalte de uñas o alhajas.
- De ser posible, acudir acompañada de una persona de confianza para que te ayude a volver a casa más tarde.
Después del procedimiento, es recomendable:
- Descansar durante dos días y evitar el trabajo vigoroso y levantar objetos pesados durante una semana.
- Mantener la incisión limpia y seca durante uno o dos días.
- Evitar frotar la incisión durante una semana.
- Abstenerse de practicar sexo durante por lo menos una semana. Si los dolores duran más de una semana, evitar el sexo hasta que no duela.
Corrección de malentendidos
La esterilización femenina:
- No debilita a la mujer.
- No provoca dolor prolongado de espalda, útero ni abdomen.
- No se extirpa el útero ni hay necesidad de hacerlo.
- No provoca desequilibrios hormonales.
- No provoca sangrado más abundante ni irregular, ni produce modificaciones en el ciclo menstrual de la mujer.
- No provoca alteraciones de peso, apetito o aspecto.
- No modifica el comportamiento sexual de la mujer ni su impulso sexual.
- Reduce considerablemente el riesgo de embarazo ectópico.
