Durante el embarazo y la lactancia, son necesarias aportaciones adicionales de nutrientes, adicionales a las que se obtienen a partir de la alimentación.
Es por eso que tu doctora te aconsejará unos complementos alimenticios que reportarán beneficios tanto para la madre como para el feto, primero, y el bebé, después.
¿Cuáles son estos complementos y qué aportan?
Yodo
- Interviene en la síntesis de hormonas tiroideas en la madre y ayuda al mantenimiento de la función tiroidea normal.
- Contribuye al buen desarrollo del cerebro del bebé.
- Previene el retraso de crecimiento del bebé porque participa en su crecimiento.
- Durante la lactancia, favorece el desarrollo neurológico y cognitivo del niño.
Hierro
- Necesario para formar glóbulos rojos y hemoglobina en la sangre, que aportan oxígeno al bebé.
- Favorece el desarrollo físico y cognitivo del bebé.
- Al formar glóbulos rojos y hemoglobina en la sangre, evita la anemia, el cansancio y la fatiga de la madre.
- Contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario.
Ácidos grasos Omega-3 (DHA-EPA)
- Esencial para el desarrollo cerebral y visual del bebé.
- Mejora el peso al nacer.
- Contribuye a reducir los partos pre-término y la preeclampsia.
- Durante la lactancia interviene en el desarrollo cerebral y visual, psicomotor y cognitivo del bebé. Su déficit se relaciona con un aumento de TDAH.
- Previene la depresión postparto en la madre.
Vitamina A/Provitamina (Betacaroteno)
- Ayuda al mantenimiento de la visión.
- Contribuye al crecimiento de los huesos.
- Es esencial para el desarrollo embrionario.
- Disminuye el riesgo de desprendimiento de placenta.
- Ayuda a la madre a mantener una piel y unas mucosas saludables.
- Durante la lactancia interviene en el desarrollo cerebral y visual y refuerza el sistema inmunológico